La Escuela de Electrificación cierra su ciclo de verano con una sesión dedicada a analizar el impacto real del vehículo eléctrico en nuestro entorno.

Aunque ningún sistema de transporte es completamente neutro, los datos son claros: a lo largo de su vida útil, un coche eléctrico genera una huella de carbono significativamente menor que uno de combustión. Y los avances no se detienen ahí. Hoy, gran parte de los materiales de las baterías ya pueden reciclarse y reutilizarse, abriendo la puerta a una segunda vida útil y a nuevas soluciones energéticas sostenibles.

Pero el impacto va más allá de lo medioambiental. La electrificación impulsa la creación de empleo, fomenta la innovación industrial y transforma nuestra forma de movernos. En esta última sesión, exploraremos cómo la movilidad eléctrica no solo mejora el aire que respiramos, sino también el futuro que construimos.

Próximamente anunciaremos los ponentes invitados.

Evento organizado en colaboración con CARNET Barcelona.

La sesión se impartirá en inglés.

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